Los cuerpos fueron hallados carbonizados y con signos de tortura en la urbanización San Matías, salida a Coata
La ciudad amaneció conmocionada tras el hallazgo de dos cuerpos totalmente carbonizados a un costado de la avenida Chilla con Modesto Borda, en la urbanización San Matías, salida a Coata. El macabro hecho ocurrió cerca de las 5:15 de la mañana del lunes, cuando una trabajadora de limpieza encontró los restos humanos aún humeantes.
Los primeros en llegar fueron agentes de Serenazgo, seguidos por la Policía de Investigación Criminal (Areincri PNP), peritos de Criminalística y representantes del Ministerio Público, quienes acordonaron la zona y recolectaron evidencias.
ESCENA DEL HORROR
Las víctimas estaban tendidas una junto a otra, con signos de tortura y amordazamiento. Uno de los varones tenía las manos atadas con alambre, y ambos presentaban bolsas plásticas y pasamontañas en la cabeza. En el lugar se hallaron restos de combustible y una caja de fósforos, usados aparentemente para incinerarlos.
Los peritos no descartan que los hombres aún estuvieran con vida al momento de ser quemados. Por la posición de los cuerpos, sospechan que el crimen se cometió en otro punto y luego fueron trasladados hasta la vía pública.
UN CRIMEN CON MENSAJE
Fuentes policiales indicaron que los asesinos no intentaron ocultar el crimen, sino exhibirlo como advertencia. Por el nivel de violencia y la exposición del hecho en una zona urbana, se presume que el doble asesinato tendría relación con ajustes de cuentas o mensajes intimidatorios.
LAS VÍCTIMAS
Los fallecidos fueron identificados como:
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James René Huaquipaco Ortiz (39), natural de Huancané, exsereno y transportista.
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Kener Rojas Rocca (33), natural de Andahuaylillas (Cusco), conductor de una empresa contratista del Gobierno Regional de Puno.
Ambos eran amigos y colegas. Según las primeras pesquisas, el sábado 11 de octubre se reunieron con un grupo de amigos después de las 6:00 p. m., y desde entonces sus familias perdieron contacto con ellos.
INVESTIGACIÓN EN CURSO
Los cuerpos fueron trasladados a la morgue de Juliaca para las pericias correspondientes. La Policía y la Fiscalía investigan si el crimen estaría vinculado a actividades ilícitas o conflictos personales, aunque las víctimas no registran antecedentes penales.
El caso ha generado profunda indignación entre la población, que exige resultados inmediatos en una ciudad cada vez más golpeada por la inseguridad y la violencia criminal.
