Denuncian falta de comunicación y medidas arbitrarias por parte de la Municipalidad de El Collao.
Vecinos y comerciantes del Jirón José Olaya en la ciudad de Ilave expresaron su malestar por la reciente pintura amarilla aplicada en las aceras de sus negocios ayer por la mañana, sin recibir ninguna notificación ni explicación previa por parte de la Municipalidad Provincial de El Collao.
Los afectados aseguran que esta medida sería una represalia municipal tras recientes decomisos de pertenencias a vendedores que trabajan en la vía pública. “No, no nos están capacitando nada”, declaró uno de los comerciantes entrevistados, quien además señaló que los inspectores llegan constantemente para retirar mercadería sin ofrecer información sobre los motivos o el alcance de las disposiciones.
El sector está compuesto principalmente por talleres y tiendas de repuestos para bicicletas y motos, ubicados cerca del mercado central. Los vecinos indicaron que, mientras sus aceras fueron pintadas, el mercado principal —donde se venden carnes y frutas— no recibió el mismo tratamiento, lo que califican como una acción arbitraria y discriminatoria.
“En vez de que sea una calle organizada, al contrario, generan un desorden”, opinó una pobladora, al tiempo que cuestionó el estado actual de la vía, que no está pavimentada y presenta problemas de tránsito peatonal y vehicular.
Los vecinos pidieron que la municipalidad explique públicamente los objetivos de la intervención y genere espacios de diálogo antes de aplicar nuevas medidas urbanas. “Sería bueno que nos den a conocer cuál es el objetivo o por qué están haciendo todo eso”, añadió una de las comerciantes.
La situación refleja la creciente tensión entre los vendedores del centro de Ilave y las autoridades municipales, quienes, según los afectados, actúan sin transparencia ni coordinación comunitaria.
