Abogado de Dina Boluarte justifica represión en protestas: ‘¡No eran manifestaciones pacíficas!’

Entre diciembre de 2022 y enero de 2023, el Perú vivió intensas protestas tras la destitución del presidente Pedro Castillo, éstas manifestaciones, que exigían la renuncia de la mandataria Dina Boluarte y el cierre del Congreso, fueron respondidas con dureza por las fuerzas policiales y el ejército. Meses después, se contabilizó un total de 61 fallecidos, incluyendo 49 civiles presuntamente asesinados por las fuerzas del orden, y más de 970 heridos.
Una investigación de The New York Times reveló el uso de fuerza excesiva por parte de la policía y el ejército peruano contra los manifestantes. El análisis de videos, imágenes y testimonios mostró que las fuerzas de seguridad emplearon tácticas letales, violando sus propios protocolos. Se documentaron casos de uso de munición letal contra civiles desarmados y disparos indiscriminados.
Los incidentes más graves ocurrieron en Ayacucho, Cusco, Juliaca y Macusani, donde se registraron numerosas muertes por armas de fuego. Se observó el uso de fusiles de asalto Galil, escopetas con munición letal y rifles Kalashnikov por parte de la policía y el ejército.
En este contexto, Joseph Campos, abogado de la presidenta Dina Boluarte, en una entrevista con Exitosa, rechazó categóricamente calificar estos eventos como “protestas”. Argumentó: “Yo nunca lo califico de protestas. No porque si fueran protestas tuvieran protección constitucional y convencional.”
Campos enfatizó: “Lo que hemos visto no es protesta, de tal manera que como no tenía protección ni constitucional y convencional, se tenía que reprimir y controlarlo como manda la Constitución.”
El abogado hizo una distinción crucial entre protestas legítimas y lo que él denomina “manifestaciones violentas”. Campos explicó: “La protesta es el ejercicio conjunto de la libertad de reunión y expresión. Pero eso solo obtiene protección cuando se ejerce de manera pacífica.”
Campos fue específico al describir lo que no considera pacífico: “Pacífica no es toma carreteras, no es tomar aeropuertos, no matar policías, no matar miembros del ejército, no tener armas, como lo dijo la propia Comisión Interamericana.”
El abogado comparó las manifestaciones con un intento de golpe de Estado: “Fueron manifestaciones violentas, con objetivos muy similares a la de un golpe de Estado. Habiendo ocurrido el golpe de Estado de Pedro Castillo.”
Campos concluyo justificando las acciones gubernamentales, manteniendo su postura de que fueron necesarias para controlar lo que él considera manifestaciones violentas y no protestas legítimas, a pesar de lamentar las muertes ocurridas.