
El escritor puneño Jorge Flórez Áybar, una de las voces más notables de la literatura andina contemporánea, falleció ayer domingo 14 de septiembre, a los 82 años, dejando un legado que marcó profundamente la identidad cultural del altiplano y del Perú.
Trayectoria intelectual
Nacido en Puno el 9 de noviembre de 1942, Flórez Áybar fue poeta, narrador, novelista y ensayista. Su primer poemario, Obaydina (1969), marcó una irrupción temprana en la literatura andina, donde lo íntimo se entrelaza con lo colectivo, lo social y lo histórico.
En narrativa, su obra evolucionó desde Más allá de las nubes hasta su emblemática novela La agonía de Kamáchiq, donde exploró el marxismo, la cultura andina, la violencia política y los dilemas morales de sociedades en conflicto. En el ensayo, títulos como La novela puneña en el siglo XX o Literatura y violencia en los Andes lo consolidaron como un crítico lúcido de la colonialidad literaria y un defensor de una estética propia de los Andes.
Su alter ego “Alexander Petrova” fue vehículo de muchas de sus vivencias y reflexiones en novelas como Los ojos del puma de piedra. En una entrevista, confesó: “La violencia, la miseria, el hambre, la muerte son temas permanentes en casi todas mis obras”.
Un intelectual polémico y comprometido
Flórez Áybar fue un pensador crítico que cuestionó la hegemonía limeña y la dependencia cultural, defendiendo la necesidad de que la literatura andina genere su propia teoría estética. Su vida estuvo marcada por la polémica, la disciplina intelectual y la integridad ética frente a la corrupción.
Amigos cercanos, como José Luis Velásquez Garambel, lo recordaron como un hombre con “alma de revolucionario”, mientras que el Instituto Americano de Arte de Puno lo definió como un referente imprescindible de la literatura regional.
Reacciones y homenajes
Su partida ha generado hondas muestras de pesar en el ámbito cultural puneño. Yolanda Cornejo lo llamó “un libro viviente, lleno por descubrir”. Mario Tinta Vásquez expresó: “Honor y gloria, vate carolino”. Vasty Lescano lo evocó como “el más noble, inteligente y valeroso de todos”.
Los restos de Flórez Áybar son velados en el local universitario del Parque Pino. Hoy, a las 10:00 horas, recibirá homenajes en la Municipalidad Provincial de Puno y, al mediodía, se oficiará una misa de cuerpo presente en la Catedral. Posteriormente será sepultado en el Cementerio Laikakota.
Un legado para la memoria
La vida y obra de Jorge Flórez Áybar fueron testimonio de persistencia y urgencia: leer, escribir, pensar y ser consciente de las raíces e injusticias, con la convicción de que la literatura es resistencia, memoria y construcción.
Aunque su partida deja un vacío, su legado perdura en cada poema, ensayo y novela que escribió, así como en las preguntas que aún inspiran a nuevas generaciones de lectores y escritores.